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Una resolución de la Secretaría de Cultura designa a Mauricio TOMASINO en un puesto clave del Instituto Nacional del Teatro, pero con una *autorización excepcional* que lo exime de cumplir los requisitos mínimos. ¿Se prioriza la idoneidad o la conveniencia política en el sector cultural?
El Boletín Oficial de hoy trae una noticia que hará ruido en los pasillos de la cultura nacional: la Secretaría de Cultura de la Presidencia de la Nación acaba de designar, con fecha 9 de diciembre de 2025, a Mauricio Alejandro TOMASINO (D.N.I. Nº 27.608.134) como Director de Asuntos Jurídicos del Instituto Nacional del Teatro (INT). Pero la designación no es una más, ¡sino que viene con una autorización excepcional por no reunir los requisitos mínimos exigidos por el Convenio Colectivo de Trabajo Sectorial del SISTEMA NACIONAL DE EMPLEO PÚBLICO (SINEP)!
¿Qué significa esto para el ciudadano de a pie? Básicamente, que para un cargo de la Planta Permanente Nivel A - Grado 0, Función Ejecutiva II, se pasó por alto la normativa que busca asegurar la idoneidad y experiencia para el puesto. Esta decisión, que rige a partir del 1 de octubre de 2025 y por un período de Ciento Ochenta (180) días hábiles, abre un interrogante sobre los criterios de selección en la administración pública. La resolución misma establece que, una vez finalizado este plazo, el cargo deberá ser cubierto 'conforme a los requisitos y sistemas de selección vigentes', lo que subraya la naturaleza provisoria y anómala de esta designación inicial.
El Instituto Nacional del Teatro, un organismo clave para el desarrollo y fomento de las artes escénicas en nuestro país, se encuentra en un momento de redefinición. Recientemente, el Decreto N° 627/2025 restituyó la plena vigencia de su ley fundacional (Nº 24.800), y el Decreto N° 686/2025 incorporó la estructura de la Secretaría de Cultura a la órbita presidencial. En este contexto de reordenamiento y reactivación del sector, la designación de un Director Jurídico con estas características genera suspicacias y plantea dudas sobre la transparencia en la gestión de los recursos humanos del Estado.
Para el ciudadano común, esta medida es un claro ejemplo de cómo la administración pública, a veces, se flexibiliza en sus propias reglas. Si bien se aclara que el cargo deberá ser cubierto mediante un proceso de selección en el futuro, la excepción inicial sienta un precedente que puede ser interpretado como una falta de respeto por la carrera administrativa y un guiño a la discrecionalidad política. La pregunta es inevitable: ¿Es esta la señal que queremos dar en un sector tan sensible y vital como la cultura?
El gasto de esta designación será cubierto por el presupuesto vigente de la Jurisdicción 20 - Presidencia de la Nación, Subjurisdicción 14 - Secretaría de Cultura - Entidad 117 - Instituto Nacional del Teatro, utilizando partidas del Ejercicio 2025, prorrogadas del presupuesto 2023.
"Esta designación excepcional reabre el debate sobre la meritocracia y la transparencia en los cargos públicos, especialmente en un área tan delicada como la cultura que ha sido objeto de recientes reestructuraciones."
¡Atención! Si te interesa el futuro de la cultura y la transparencia en el Estado, seguí de cerca este nombramiento y el próximo llamado a concurso para la cobertura definitiva del cargo. Las futuras actualizaciones se publicarán en el Boletín Oficial, ¡así que permanecé informado!