¡INCAA Impone su Sello! Nuevas Reglas de Branding para el Cine Nacional

El Instituto Nacional de Cine y Artes Audiovisuales (INCAA) ha metido mano en la pantalla grande con la Resolución 778/2025, estableciendo una secuencia obligatoria de logotipos animados institucionales para todas las películas de producción nacional que accedan a los beneficios de la Ley N° 17.741. A partir del 1° de enero de 2026, los films deberán comenzar con la animación de Marca País, seguida por CINE ARGENTINO y, finalmente, el logo del INCAA. ¡Un verdadero desfile de identidad nacional antes de que empiece la acción!

¿Marketing o Censura Estilística?

La medida busca "reforzar su posicionamiento local e internacional en el mercado audiovisual" y unificar la imagen, según el organismo. Las placas adicionales, como las de distribución, podrán aparecer antes o después, pero nunca interrumpir la secuencia oficial. Y ojo, que la obligación se extiende a todos los medios publicitarios de la película, tanto en Argentina como en el exterior. La consecuencia de no cumplir es drástica: la película no será clasificada, lo que en la práctica significa que no podrá ser estrenada comercialmente. ¡Una movida fuerte que pone al branding institucional por encima de todo!

En el caso de coproducciones internacionales, hay una pequeña ventana de flexibilidad: el productor podrá optar por la imagen animada o estática del INCAA, y el orden de los isologotipos podrá alterarse según la proporción de los aportes. Esto reconoce la complejidad de las producciones globales. La Resolución deroga las anteriores normativas sobre logotipos (INCAA N° 2093/2003 y N° 727/2007), buscando una simplificación y actualización. Mientras el INCAA asegura que es una estrategia para potenciar el cine nacional, algunos productores podrían ver esto como una intromisión en la estética y el inicio de sus obras. ¿Es un paso necesario para la proyección internacional o una burocracia más que frena la creatividad?